El uso de marines y tropas para contener las protestas ha llegado este jueves a los tribunales. Por sexto día consecutivo, miles de personas se movilizan en decenas de ciudades de Estados Unidos.
Los Ángeles se ha convertido en el epicentro de la indignación contra Trump, casi cinco meses después de su llegada a la Casa Blanca. Las redadas migratorias realizadas el pasado viernes en esta ciudad —la segunda con mayor población mexicana después de Ciudad de México— desataron la reacción de cientos de ciudadanos y activistas. En respuesta, el presidente tomó una decisión sin precedentes: desplegar la Guardia Nacional en la ciudad sin que el gobernador de California, Gavin Newsom, lo solicitara previamente, desafiando las normas de un país fundado sobre el respeto a la ley. Este acto ha tenido un efecto dominó en el resto del país, donde las protestas contra la militarización de Los Ángeles y las políticas migratorias de Trump se han extendido a cerca de treinta ciudades durante seis días consecutivos.
La jornada de este miércoles resultó algo más calmada que las anteriores. No se repitieron las imágenes de choques violentos ni de arrestos masivos, en parte debido al toque de queda que se impuso en el centro de Los Ángeles desde la noche del martes. Sin embargo, hasta pocos minutos antes de las ocho de la noche, cientos de personas volvieron a reunirse en las calles de la segunda ciudad más grande del país. “¡Vergüenza!”, coreaban a los agentes que intentaron dispersarlos cerca del Ayuntamiento utilizando balas de goma y gas lacrimógeno. Hubo también movilizaciones en Nueva York —donde se registraron cinco detenciones—, San Antonio (Texas) y San Luis (Misuri).
Trump ha insinuado la posibilidad de extender la presencia militar a otras ciudades, lo que ha generado inquietud sobre el tipo de control que planea ejercer en el país. Es la primera vez en sesenta años que un presidente ordena un despliegue semejante, desde que Lyndon B. Johnson lo hiciera para permitir las marchas de Martin Luther King y otros activistas en Alabama.