El Gobierno dispuso una serie de medidas con el objetivo de frenar la circulación del coronavirus.
Según publicó el diario La Nación, el presidente Alberto Fernández decretó que, en las ciudades donde hay mayor riesgo epidemiológico, a partir de las 0 del viernes no se podrá circular entre las 24 y las 6 de la mañana. Además, los bares y restaurantes deberán cerrar a las 23. Las medidas, que afectarán a la Ciudad de Buenos Aires y 44 municipios del conurbano bonaerense, también incluyen la suspensión de las actividades sociales en domicilios particulares.
Además, no se podrán realizar reuniones sociales en espacios públicos al aire libre de más de 20 personas y cerrarán los casinos, bingos, discotecas o cualquier salón de fiestas. Se suspenden también las prácticas recreativas de cualquier deporte en lugares cerrados donde participen más de 10 personas. Desde la Casa Rosada explicaron que solo están autorizadas las burbujas familiares en domicilios particulares.
“Hemos entrado en la segunda ola. Las próximas tres semanas son muy importantes”, dijo el Presidente. Y agregó: “No me gusta que se haga política con la pandemia. Solo en los últimos siete días los casos aumentaron un 36% en todo el país y un 53% en el AMBA”.
Así, después de dos reuniones tensas entre Nación, Ciudad y Provincia, el Presidente finalmente avanzó con una postura intermedia. Es decir que solo los distritos en “rojo” –que tienen indicadores sanitarios críticos– tendrán restricciones totales a la circulación nocturna.
En las últimas dos semanas, según fuentes del Ministerio de Salud, los distritos que se encuentran en esta situación aumentaron de 48 a 87, lo que incluye casi 26 millones de personas. Además de la Capital y el conurbano bonaerense, también atraviesan esa situación las capitales de Córdoba, Mendoza, Tucumán, San Juan y Rosario, en Santa Fe, entre otras grandes ciudades del país.
“En estos meses queremos cuidar la salud, cuidar la recuperación económica y cuidar todo lo que sea posible la presencialidad en las escuelas”, dijo el mandatario, que así descartó en esta etapa cerrar las escuelas, uno de los grandes errores que el Gobierno aprendió de la cuarentena 2020.
En las zonas del país consideradas de mediano riesgo epidemiológico, el Presidente anunció que será “responsabilidad y facultad de gobernadores y gobernadoras adoptar en forma temprana medidas que disminuyan la circulación para prevenir los contagios”. En ese sentido, advirtió que “es del resorte exclusivo de las provincias el monitorear y hacer cumplir cualquier medida restrictiva de la circulación”.
“Como Presidente de la Nación tengo la responsabilidad política de tomar las riendas y seguir conduciendo al país. Pero en estas circunstancias prima mi condición humana que me obliga a cuidar la vida y la salud antes que nada”, sostuvo Fernández, quien también resolvió interrumpir los viajes grupales de egresados, de estudio y de grupos turísticos. El objetivo, según explicaron fuentes oficiales, es continuar “desalentando” los viajes al exterior.
Otro de los puntos salientes estará puesto en el transporte público: el Gobierno les pidió a los gobernadores e intendentes reforzar los mecanismos de control a través de fuerzas de Seguridad y la aplicación Cuidar. El objetivo es volver a lo que sucedió en 2020, que los trenes, colectivos y subterráneos solo sean utilizados por personas autorizadas. A partir de este jueves se comenzarán a exigir certificados para circular en el transporte público.
Desde la quinta presidencial de Olivos, donde se encuentra recluido con Covid-19, el jefe del Estado anunció esta batería de medidas que durarán hasta el 30 de abril con el objetivo de bajar la circulación del virus.
Así se grabó el mensaje de Alberto Fernández sobre las nuevas restricciones
El jefe del Estado grabó el mensaje en el jardín de la residencia oficial. Según contaron fuentes oficiales, Fernández caminó 200 metros desde la casa de huéspedes, donde se encuentra aislado, hasta el atril que preparó ceremonial. Además, integrantes de la Unidad Médica Presidencial estuvieron presentes controlando que se cumplan con todos los protocolos sanitarios.
Durante dos días el Presidente buscó avanzar en un acuerdo político que contenga a los 24 gobernadores. En esto trabajaron el Presidente, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el ministro del Interior, Eduardo De Pedro. Pese a diferencias de matices, lo que demoró la salida del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU), finalmente logró avanzar en una postura común.
“Venimos trabajando de forma coordinada, aunque a veces existen visiones distintas. Todos los gobernadores estaban al tanto, pero no sé si estaban todos de acuerdo”, resumió un hombre de máxima confianza del Presidente.
La preocupación por el incremento sostenido de casos en la última semana y la confirmación de que comenzó la segunda ola limaron asperezas y aceleró el acercamiento. Con este paquete de medidas el gobierno nacional y las provincias buscan ganar tiempo para vacunar a la mayor cantidad de gente posible.