El proyecto, que anticipó Guzmán semanas atrás pero que recién hoy saldrá a la luz, apuntará a gravar las ganancias “extraordinarias” -superiores en un 20% al período anterior– que tuvieron algunos sectores de la economía a raíz del aumento de los precios internacionales que disparó la invasión rusa a Ucrania. Según remarcaron, no afectaría a inversiones nuevas.
“A lo que se apunta es poder capturar parte de la renta extraordinaria que no es producto de una inversión adicional, sino que es producto de la guerra, a efectos de poder atacar las principales problemáticas de la sociedad argentina y al mismo tiempo fomentar la inversión incluyendo condiciones que establezcan que si esa renta inesperada por la guerra se reinvierte, entonces la contribución que se haga sea menor”, afirmó Guzmán, al presentar la iniciativa.
Cuando se conocieron los primeros detalles del proyecto, un mes atrás, el campo reaccionó. Se trata de uno de los sectores que se vio beneficiado por la suba del precio de las commodities. No obstante, desde el Ejecutivo aclararon que “de ningún modo incluirá a la producción agropecuaria”. Aunque, en rigor, se refirieron a los productores.
El anuncio tendrá lugar en medio del cimbronazo que sufrió el Gobierno este fin de semana con el despido del ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, y el regreso a la arena política nacional del embajador en Brasil, Daniel Scioli, quien ingresará al Gabinete la semana próxima.
Un mes atrás, cuando se conocieron las intenciones del Gobierno en avanzar en esta iniciativa, la desde la esfera empresarial salieron a rechazar la creación de un nuevo impuesto. Importantes figuras del sector remarcaron que sería un mensaje negativo para la inversión en la Argentina, e hicieron hincapié en la carga tributaria ya existente.
“El mensaje [que envía el Gobierno] es: ‘Señor, antes de hacer negocios en la Argentina mírelo 400 veces, porque cada día le ponen un impuesto nuevo’”, había expresado en declaraciones radiales Jaime Campos, el presidente de la Asociación Empresaria Argentina (AEA).
Precisamente, el anuncio se dará un día antes de que esa entidad celebre su aniversario número 20, con la presencia de toda la comisión directiva y del que participará el Presidente con un mensaje grabado.
“La creación de nuevos impuestos -como el recientemente anunciado ‘impuesto a la renta inesperada’- va en la dirección opuesta a lo señalado. En la Argentina ya están en vigencia 165 impuestos y la carga tributaria sobre el sector formal de la economía es muy elevada y ha crecido fuertemente en los últimos 20 años, superando holgadamente el promedio de la región. Con menos impuestos generaremos más inversiones y empleo”, expresó la AEA a través de un comunicado en conjunto, entidad que agrupa a empresas como Techint, Arcor, Grupo Clarín, Santander, PAE, Mercado Libre, Toyota y Globant, entre otras.
La Unión Industrial Argentina (UIA) tampoco quedó fuera del debate. En un comunicado enviado a los medios, la institución advirtió que existe “preocupación” por la posible creación de una alícuota adicional que le sume presión al sector. “Al respecto, se analizó cómo afectará a la inversión un nuevo incremento en la presión tributaria sobre el sector formal de la economía y el impacto negativo que tendrá en la actividad y el empleo”, indicaron.
Por su parte, César Litvin, CEO del Estudio Lisicki, Litvin & Asociados, detalló que en la actualidad las empresas alcanzadas ya pagan por impuesto a las ganancias una tasa efectiva del 39,55% (35%, más el 7% de los dividendos).