FORMOSA.– Mientras Gildo Insfrán festeja en silencio haber obtenido su octavo mandato como gobernador de Formosa con el 69,24 % de los votos, la oposición radical estalló por el aire por la derrota, a la que consideraron una “catástrofe electoral”.
Juntos por el Cambio, con el diputado nacional Fernando Carbajal como candidato a gobernador, obtuvo un 20,24% de los votos. Apoya a la fórmula presidencial de Horacio Rodríguez Larreta y Gerardo Morales. El radical exclamó indignado que los “padres de la derrota” son otros radicales: el senador nacional Luis Naidenoff y el diputado nacional Ricardo Buryaile, que apoyan a la fórmula presidencial de Patricia Bullrich. Además, Carbajal se quejó que lo dejaron solo en toda la campaña.
La principal consecuencia de la debacle electoral de la alianza Frente Amplio, fue la exposición de la ruptura interna del radicalismo, pues el propio Carbajal se lanzó como candidato a senador nacional por Formosa, en la lista de Larreta, junto con Gabriela Neme, como diputada nacional, disidente del peronismo, mientras que Naidenoff y Buryaile van por la renovación de sus mandatos por cuarta y quinta vez como senador y diputados respectivamente, por la lista de Bullrich.
Mientras la convivencia y la paz que mantenía el radicalismo en la campaña volaba por el aire, el tercer candidato en discordia en estas elecciones, el debutante Francisco Paoltroni, un ganadero de 42 años, llegó al 10 por ciento de los votos con su partido Libertad, Trabajo y Progreso que ahora apoya oficialmente la candidatura de Javier Milei. Paoltroni dijo que será el candidato a senador nacional por Milei.
“Ahora empezamos a trabajar para la elección nacional, esta fue nuestra primera elección, ya sabemos ahora. Pensábamos que nos iba a ir mejor, teníamos datos que nos ponían más arriba, pero hay un alto nivel de desconocimiento y ser un camino a recorrer. No vamos a claudicar”, dijo Paoltroni.
Paoltroni aseguró que hay varis escenarios que pueden cambiar el destino de Formosa, con Insfrán como gobernador eterno. Señaló que es posible que la Corte en algún momento le ponga un límite a la reelección permanente de Insfrán.
En el análisis que hizo Fernando Carbajal sobre las razones de la “catástrofe electoral” de Juntos por el Cambio, los responsables son la Corte Suprema de Justicia porque no falló en favor de frenar la reelección de Insfrán y luego la propia interna radical, pues señaló que el senador Naidenoff, el diputado Buryaile y el presidente del radicalismo local Osvaldo Zárate “son los padres de la derrota”.
Con 32 grados, la capital formoseña amaneció bulliciosa, se retomó el cruce en lancha a la vecina Puerto Alberti, en Paraguay. Ni para el festejo político de Insfrán, que eligió celebrar por Twitter celebrando la unidad del peronismo. Mañana miércoles está prevista la visita a Formosa del presidente Alberto Fernández para subirse al arrollador triunfo del peronista.
“Fue una catástrofe electoral, teníamos la expectativa de repetir la tendencia de la última elección legislativa (cuando vencieron al gildismo en la Ciudad). No esperábamos que el Gobierno sacara tanta diferencia” se sinceró Carbajal, el exjuez federal que tuvo destacada actuación en la pandemia para levantar los cierres impuestos en Formosa.
Carbajal analizó que el silencio de la Corte al no pronunciarse ante su reclamo para declarar inconstitucional de reelección de Insfrán, alentó a que se votara al peronismo una vez más. “Fue una ratificación del poder de Gildo Insfrán, la sociedad lo vio así”, dijo Carbajal.
“Hubo operaciones políticas para que la Corte no se pronuncie, no tengo dudas, no hay razón jurídica que justifique que la Corte no haya dicho nada. ¿Porque a Sergio Uñac le dijeron que no en San Juan a un mandato de 16 años y a Gildo le dice que si a un mandato de 40 años? Algo pasó en el medio. El poder de Insfrán es tan grande que llega hasta la Corte”, se indignó Carbajal.
Claro que mencionó que el segundo motivo del fracaso electoral es el sistema de reglas amañadas y el uso de todo el aparato estatal por parte del Gobierno para ganar. “Cometimos errores, no tengo ninguna duda”, dijo, pero señaló que uno de ellos no era haber cerrado un acuerdo con Paoltroni. “Los números nos dieron la razón en que debíamos presidir la fórmula”, remarcó, aunque admitió que el empresario interpretó el reclamo social de renovación que expresaron los formoseños.
Pero haciendo una profunda autocrítica señaló que la culpa de la derrota la tienen el presidente del partido, Zárate, que criticó a la candidata Gabriela Neme, con quien habían firmado un acuerdo, y de Naidenoff y Buryaile.
Dijo que fueron ellos los que no recorrieron el interior del territorio provincial hacia el oeste, donde están la mayor parte de las comunidades aborígenes. Dijo que no se los vio en ningún lado ni hay un posteo con sus actos en esos lugares.
“Estuve solo en esta campaña electoral”, dijo Carbajal, y se refirió a los dirigentes nacionales, no a los locales, que lo apoyaron en sus recorridas. “Iba a los actos y me encontraba con la remera de Naidenof que no era candidato a nada, y no hizo ninguna mención a mi candidatura a gobernador”, se quejó Carbajal con amargura.
Dijo que propuso renovar la dirigencia del partido en la provincia pero que no le hicieron caso y se perpetuaron las misma autoridades y dirigentes tradicionales que vienen fracasando en la elección provincial y renovando sus bancas en el Congreso desde hace más de una década.
“Los padres de la derrota son la dirigencia tradicional del partido, sin duda son el presidente Zárate, Luis Naidenoff y Buryaile” afirmó el exjuez federal en una entrevista en Radio Uno y señaló que era “extraño” que Buryaile haya ido con Bullrich, “porque estaba en el equipo de Gerardo Morales, donde estamos nosotros como orgánicos del partido”. Señaló que la estrategia política la vienen marcando ellos a los que señaló como los responsables de la catástrofe.
Mientras la oposición se rompió en desbandada y trata de organizarse de cara al futuro de las PASO de agosto y las elecciones generales de octubre, el gobernador Gildo Insfrán, que había convocado a las 21 a una conferencia de prensa y festejos, suspendió todo a las 23.30.
Con un centenar de periodistas esperando en los salones del hotel Howard Johnson, donde se instalaron cuatro pantallas led gigantes y música a todo volumen con ambiente festivo, el gobernador mandó decir que no venía.
Un funcionario provincial explicó que estaba analizando los resultados de la capital formoseña, donde su candidato perdió y ganó Jorge Jofré. La militancia que se sacaba fotos con una estatua de Perón y Evita colocada en el lobby del hotel, se había reunido en los salones. Pero se fue sin ver a Insfrán levantar los brazos en alto para celebrar y hacer la V de la victoria. Anunció que hoy iba a hacer volver a convocar a la prensa para analizar el resultado electoral, pero el convite no se concretó.