El expresidente Mauricio Macri defendió este domingo el pacto que selló junto a Patricia Bullrich con el candidato a presidente por La Libertad Avanza, Javier Milei. Lo hizo en una entrevista con José del Rio en LN+ en la que admitió que Milei genera incertidumbre, pero lo contrastó con Sergio Massa, a quien acusó de haberle mentido “siempre” y para quien pidió un “perfil psiquiátrico por su compulsión a mentir”. Despotricó contra los críticos del acuerdo, como Gerardo Morales y Martín Lousteau, a quienes tildó de “perdedores”, y afirmó que la interna de Juntos por el Cambio fue perjudicial, punto en el que centró sus críticas contra el exprecandidato presidencial Horacio Rodríguez Larreta por presentar “una propuesta de cambio más tenue”.
-¿Por qué es tan importante esta elección?
-Porque puede dejar atrás el populismo. Yo diría que a una cultura del poder oscura, prepotente, que usa el Estado en beneficio propio, que avasalla libertades y ataca a la Justicia y al periodismo. Estas cosas han destruido la confianza entre la Argentina y el mundo. Nos han llevado a que el 60% de los jóvenes estén en la pobreza y la inflación descontrolada, rumbo a la hiperinflación. Cosas que hemos hablado y que el kirchnerismo, recargado con Massa a la cabeza, lo único que ha hecho es empeorar la situación.
– Sin embargo, Sergio Massa ganó la elección y Axel Kicillof se quedó con la provincia de Buenos Aires, ¿a qué se debe?
-A que se dividió la oferta del cambio. Hubo dos propuestas, o tres porque podemos incluir la del gringo Schiaretti. Eso es lo positivo, más del 60% de los argentinos le han dicho basta a esta forma oscura de utilizar el poder en beneficio de aquellos que deberían ser servidores públicos y terminan siendo apropiadores de lo público. Y esa interna del cambio la ganó Javier Milei. Esto es lo que precipitó todas las cosas que hemos vivido en la semana.
– ¿De qué manera la disputa que tuvo Juntos por el Cambio, entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta por la candidatura presidencial, perjudicó sus posibilidades electorales?
-Nos perjudicó. Nuestra raíz republicana y democrática hizo que no hallamos querido elegir a dedo a un candidato, que se dirimiese primero entre cinco candidatos al principio y después dos, y eso nos desgastó. Especialmente porque una de las propuestas era más vista como de continuidad. La propuesta de Horacio hizo quedar a Juntos por el Cambio como una propuesta de cambio más tenue, entonces nos ganó la delantera el cambio más decidido y profundo. Eso debilitó y le dio un lugar más amplio a Javier Milei para plantar su propuesta radical de cambio que, por más que dentro de nuestro espacio la expresaba Patricia Bullrich, esa interna nos desdibujó. Siempre decía: ‘No es lo mismo el 23 que el 15′; en el 15 había vocación de cambio institucional pero no total, ahora hay una vocación de cambio total. Hay que ser más audaces, hay que plantear un cambio radical, rápido, contundente y, lamentablemente, esa propuesta de ‘vamos a incorporar al peronismo de acá, el kirchnerismo de allá’ se percibió como que no era tanto cambio y nos complicó.
-¿Por qué no fue usted candidato?
-Había cinco candidatos que querían y hacían campaña todo el día con que yo no podía ser candidato. Habrá sido un poquito mi decisión. Lo hice muy convencido de que era un aporte a la Argentina para que las ideas se consoliden con otros candidatos. Lo hice de corazón. Ahora aquellos que cuestionan por qué no fui candidato, deben recordar cuánta oposición interna tuve. Igualmente, Patricia fue una excelente candidata.
-Cuando lo ve a Gerardo Morales y las declaraciones de otros radicales, ¿qué siente?
-Que son una minoría y que perdieron. Fueron perdedores en la interna. La mayoría de los radicales se han modernizado, tienen una actitud distinta para vincularse con el mundo, cómo liberar la economía, como gestionar en sus provincias y ciudades. No están cargados de esta visión de ideas viejas. Fue malo para Juntos por el Cambio que Morales haya tomado la presidencia. Pero no vale la pena hablar de ellos. Lo que tienen que hacer es decir las cosas como son de una vez: Morales, desde Gualeguaychú que quería a Massa como socio del radicalismo, nunca dejó de ser socio de Massa. Estos cuatro años, sus diputados votaron cantidad de veces en contra Juntos por el Cambio y a favor de Massa, y todos nosotros tuvimos que hacernos los distraídos para contener y conservar la paz en Juntos por el Cambio. No por algo, Alfonsín en 2002 se fue del Senado, dicen, porque no aguantaba más las cosas que hacía Morales. Las canas verdes que me sacó a mí también se las sacó a Alfonsín en su momento. Ellos, Yacobitti, Lousteau y Morales creen que esa forma de gobernar que va a tener Massa es una versión mejorada del kirchnerismo. Tenemos que discutir continuidad o cambio, y yo estoy en el cambio. No se puede votar a Massa porque es votar lo horroroso del kirchnerismo que tuvimos y lo horroroso del presente de Massa, los Kirchner y Alberto Fernández.