Tuvo su primer cortocircuito la novedosa alianza de los gremios del transporte que se gestó el 20 de septiembre pasado para rechazar la eventual privatización de Aerolíneas Argentinas. Cuando se realice mañana el plenario de los referentes de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (Catt) y la Unión General de Asociaciones Sindicales de Trabajadores del Transporte (Ugatt), habrá un actor clave que rechazará activar un paro sectorial el 17 de octubre. Se trata de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), el poderoso sindicato de los colectiveros que reúne a unos 40.000 choferes en todo el país.
Roberto Fernández, jefe de la UTA, no asistirá mañana a la convocatoria y enviará a Mario Caligari, un dirigente de su confianza. “No vamos a parar. ¿El paro sería contra el Gobierno? ¿Por qué razón?”, argumentó la postura del gremio una fuente confiable del gremio de los colectiveros. La UTA, además, tiene en vigencia la conciliación obligatoria dictada por la Secretaría de Trabajo a partir de un conflicto salarial.
Sin la adhesión de los colectiveros, corre riesgo el paro que se preveía para el 17 de octubre, la fecha consensuada inicialmente por Pablo Moyano y Omar Maturano para la protesta. Surgió otro incoveniente para definir la medida de fuerza: Moyano tiene previsto en los próximos días un viaje a Marruecos para participar de una jornada de la Federación Internacional del Transporte, una agrupación de gremios del sector de la que el referente camionero es vicepresidente.
A pesar de la baja de la UTA y las dificultades para definir una fecha para la huelga, los transportistas avanzarán mañana en su plan de lucha. “El 17 no habrá paro, se va a postergar. Pero es posible que sea otro fecha o que se realice otra medida”, advirtió un dirigente que participa de las negociaciones.
Con el conflicto de Aerolíneas Argentinas a tope y ante el debate de una hipotética privatización de la línea aérea, la Mesa Nacional del Transporte argumentó sus motivos para hacer un paro. “Los ejes de nuestros reclamos son tres: la falta de recomposición salarial; la libertad sindical y la defensa de la soberanía nacional sobre los distintos modos de transporte. La mesa se pronunció por la recuperación del salario de los gremios del transporte, que perdieron en forma general el poder adquisitivo desde que asumió Milei“, indicó el grupo en un comunicado.
Participan activamente de este armado Juan Pablo Brey (aeronavegantes); Omar Maturano y Ariel Coria (La Fraternidad); Mario Caligari (Unión Tranviarios Automotor); Pablo Moyano y Omar Pérez (camioneros); Juan Carlos Schmid (Federación Marítima Portuaria y de la Industria Naval de la República Argentina); Pablo Biró (Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas); Emiliano Gramajo (Asociación Obrera de la Industria del Transporte Automotor); Javier López (Sindicato Encargados Apuntadores Marítimos y Afines de la República Argentina) y Raúl Durdos (Sindicato Obreros Marítimos Unidos), entre otros.
“Los distintos gremios presentes coincidieron en que, desde inicios de este gobierno, se persigue a los dirigentes y se busca criminalizar la protesta social, que está amparada en la Constitución Nacional y en convenios de las máximas organizaciones Internacionales que regulan el trabajo”, indicaron en el comunicado los gremios del transporte. “Nuestro eje es la defensa de la soberanía del país, que está representada en las rutas nacionales, en los ferrocarriles, mares, ríos y cielos, frente al atropello cotidiano que vemos implementa el gobierno de Javier Milei en cada modo”, remarcaron.